Sin embargo, es el colmo cuando la persona que te regaña por descuidado es el ladrón que infringió la herida para luego le echarle sal y limón.
Así lo descubrió una joven estudiante de Educación Primaria y Temprana australiana llamada Rachel, de 22 años, quien se enteró del robo de su laptop cuando un colega suyo le llamó por teléfono para comunicarle que su propiedad había sido sustraída del centro comunitario Seaforth, ubicado en la zona septentrional de Sídney, y más aún, que el pillo responsable dejó una nota diciéndole que “tuviera más cuidado”.
El “sabio consejo”
La razón por la que el conocido de Rachel se dio cuenta tan fácilmente del robo es que encontró la nota justamente donde Rachel solía dejar su laptop en su espacio de trabajo en el centro comunitario, donde labora para el concejo de la ciudad. La chica dijo que apenas había comprado el equipo hacía pocos meses y que estaba en proceso de pagarlo.
Lo siento, pero deberías tomarte en serio este asunto de la seguridad.
Te recomiendo que le eches la culpa al concejo de la ciudad, para que te otorguen un reembolso por tu laptop.
Perdón.
-Nota anónima dejada por el ladrón