Apresidio perpetuo por femicidio fue condenado un hombre de 41 años, quien asesinó a su esposa en noviembre de 2020 en Panguipulli. Además, al momento del crimen el sujeto incumplió una orden de alejamiento por violencia intrafamiliar (VIF).
Tras esto, a casi 3 años del asesinato, el tribunal condenó al sujeto de 41 años a la pena de presidio perpetuo calificado.
La jueza Pamela Hernández explicó que, para determinar la sentencia, se consideró el prolongado tiempo en que la mujer fue víctima de violencia por parte del femicida.
De hecho, según consta en la sentencia, desde que se casaron el condenado ejerció violencia contra su esposa mediante chantajes, humillaciones e incluso la prohibición de que salga del domicilio que compartían.
De esta manera, el sujeto evitaba que la mujer tuviera amistades y realizara actividades laborales. Además, la había amenazado con incendiar la vivienda.
Finalmente, junto con el crimen cometido en Panguipulli, se consideró la extensión del mal causado, debido a que la hija de ambos fue testigo de las continuas escenas de violencia ejercida por el condenado a la víctima.
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