“Cada notificación se somete al comité judicial, pero el Ministerio de Sanidad se compromete a no publicar ningún nombre hasta que concluyan los procedimientos legales”, explicó Al Waheidi en un intercambio de mensajes, acerca de cómo la institución procesa las solicitudes de las familias sobre sus allegados desaparecidos.

El funcionario aclaró que no todas las denuncias pasan el filtro y pueden descartarse por tres motivos principales: que el comité determine que la persona desaparecida no murió por la guerra, sino por causas naturales; que determine que su muerte está relacionada con la ofensiva israelí de forma indirecta (infartos al encontrarse cerca de ataques, malnutrición, etc); o que el comité no pueda confirmar que la persona falleció (pudiendo estar detenido por las fuerzas israelíes o desaparecido, pero vivo).

Según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), en Gaza hay en estos momentos 50 millones de toneladas de escombros, a los que ha quedado reducida buena parte de la Franja tras más de año y medio de guerra.

Entre ellos, pero también en zonas inaccesibles a lo largo de Gaza (el 66 % del territorio está ahora mismo sometido a órdenes de evacuación o tomado por el Ejército israelí en áreas donde el tránsito está sometido a su aprobación), se encuentran miles de cuerpos que aún no han podido ser rescatados.