Poco después, otra chica, Emily Ortiz, de 22 años, se presentó y le dijo que había salido con el mismo chico desde hace casi un año y creía que eran exclusivos. Faith le dijo que no sabía de su existencia, pero le estaba tratando de dar una oportunidad para que le explique, pero el novio de 33 años nunca dio una respuesta.
Las mujeres continuaron intercambiando mensajes para asegurarse de que era el mismo hombre del que estaban hablando, compararon su bata y hasta el color del cepillo de dientes. Se dieron cuenta de que los cambiaba cada vez que una de ellas iba de visita.
Con el corazón roto, Faith no quería saber nada del hombre que las había engañado, así que invitó a Emily a su viaje a Costa Rica. La otra chica pensó que ella estaba loca y sus padres pensaron que podría ser peligroso salir del país con una persona desconocida, pero ambas estaban de acuerdo en que necesitaban unas vacaciones después de lo que pasaron.
Pasaron cuatro días explorando la jungla, las cascadas y superando la traición de quien las había engañado. Al hablar de sus relaciones, ambas expresaron que se enamoraron de las mismas cosas de él. Además, dijeron que extrañarían acurrucarse con los gatos, pero que definitivamente no extrañarían a sus amigos, pues suponían que estaban enterados de la doble relación.