“Con Sergio Freire lo conversamos en el escenario, a punto de salir, porque había otros planes y cambiaron. De hecho, abrir la puerta de atrás salió mal”, aseguró en el podcast Tomás va a morir.

“Pareciera que salió bien, pero no, porque se tenía que abrir altiro (sic). Fabrizio supo salir, inventó un chiste de la nada, que Los Bunkers se bajaron con Maná”, agregó.

En efecto la puerta tuvo que abrirse en dos ocasiones para que aparecieran en escena Rodrigo Salinas con los integrantes de la banda.

Ante aquello Edo Caroe indicó que la situación no se había visto mal: “ni se notó, de hecho, yo creí que estaba pensado así, que estaba súper bien escrito, porque está la expectativa, después no, para después, efectivamente, mostrar a la banda”.

“No, se abría altiro. Y con Sergio dijimos: ‘¿Qué pasa si no sale?. Hacemos rutina para salvar, inventemos algo’. Pero salió bien”, afirmó Ruminot.

“Pero salió muy bien, estaba muy feliz Fabrizio. Además, cerró muchas cosas y todo cuajó perfecto”, concluyó.