No obstante, la reacción más agresiva fue la de Luis, quien apenas lo vio verter vino en una copa se levantó a arrebatarle el recipiente. “Es mi vaso, hago con mi vaso lo que quiero”, le espetó molesto Miguelito. “No me importa”, le aseguró Mateucci.

Tras esto el argentino le quitaba continuamente la botella para que no se sirviera más vino. Luego de que Mateucci se negara a seguir comiendo si Miguelito compartía sus alimentos, el artista circense dejó el living para ir al patio donde terminó llorando junto a Eva.