Pero la periodista no cedió: “Monse, Julito, acabo de pedirle permiso a los inspectores para ver si podía abrir el libro y me dijo que sí”, se defendió.

A ello, Monse Álvarez volvió a insistirle: “Es que no es del inspector el libro”, le apuntó.

Finalmente, el momento fue interrumpido por el acompañante del conductor detenido, quien le explicó que se trataba de un pastor, develando la razón de la presencia del libro en el maletero. Por su parte, la periodista no devolvió el texto al auto y lo siguió ojeando mientras conversaba con el hombre.