Aunque la autorización de la FCC se retrasó más de lo previsto, medios especializados calificaron el anuncio como un gran logro para Starlink, ya que posiciona a la empresa por delante de competidores como Lynk, que aún no cuenta con socios comerciales en Estados Unidos.

No obstante, The Verge señaló que la aprobación incluye ciertas condiciones, ya que la FCC aún evalúa si SpaceX puede aumentar la potencia de sus satélites para admitir funciones avanzadas como llamadas de voz y transmisión de video en tiempo real.