La Cuenta Pública y su gira internacional trajeron réditos positivos para el Presidente Gabriel Boric. Esta primera quincena de junio, logró detener la caída libre que sufrió en la percepción de su gestión y -pese a errores- logró sacar adelante de buena manera sus reuniones con sus pares de Canadá y Estados Unidos.
Gabriel Boric podria sacar cuentas alegres
“Mi impresión (…) es es que nos fue bien”. Así reflexionaba el viernes recién pasado el Presidente Gabriel Boric al cierre de su gira por Norteamérica. Un balance positivo que, en conjunto con su Cuenta Pública, vienen a cerrar una primera quincena de junio con saldos alegres para el Jefe de Estado.
Tras prácticamente 11 semanas a la baja, el Mandatario logró detener este mes la caída libre en la aprobación a su gestión, según las principales encuestas.
Prueba de ello es lo arrojado por la última Pulso Ciudadano, correspondiente a la segunda semana de junio, la cual muestra que un 32,8% aprueba su gestión, aumentando en 5,5 puntos en comparación a la semana pasada (27,3%).
La encuesta Plaza Pública de Cadem, correspondiente a la segunda semana de junio, arrojó que la aprobación al presidente se mantuvo en un 44%.
Frente a este escenario, expertos plantean precisamente que dentro de los factores que explican los buenos guarismos están su mensaje presidencial a comienzos de este mes y su viaje a Canadá y Estados Unidos, instancia en la que mantuvo reuniones con sus pares Justin Trudeau y Joe Biden.
Todo ello, pese a yerros como el cometido con John Kerry, a quien acusó de estar ausente, sin percatarse que estaba a pocos pasos suyo.
FOTO CON TRUDEAU
“La teoría comparada nos indica que cuando evaluamos a las autoridades, por lo general, lo que la ciudadanía evalúa como positivo es que se vean responsables y que están al mando de la situación”, dice José Miguel Cabezas, académico del centro de investigación en sociedad y salud U. Mayor.
“Por lo tanto, la Cuenta Pública le da un semblante de una autoridad mucho más respetada al Presidente o Presidenta, y también las giras internacionales hacen lo mismo: dan muestra de cómo el país se está relacionando e interactuando con otras naciones, prácticamente de par a par”, complementa.
De acuerdo al académico, hechos como la fotografía de Boric con el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, son percibidos como un reconocimiento. En definitiva, gestos que se valoran de forma positiva.
“Ese tipo de componentes, sumado por ejemplo a los conflictos internacionales, son por los cuales las figuras presidenciales se destacan y suben su respaldo, porque se muestran, en la práctica, estando a cargo de la situación”, expresa.
En tanto, Cabezas plantea que el hecho de que Boric haya invitado en la comitiva a representantes importantes del empresariado “da cuenta de esta disposición al diálogo, de esta apertura a interactuar con distintos actores”.
“Y también está la disponibilidad de Juan Sutil, por ejemplo, de aceptar esta invitación porque perfectamente podría haberse atrincherado y decirle ‘no Presidente, no voy a ningún lado’ “, argumenta.
LOS DOS BORIC
Una visión más crítica es la que tiene el analista político y académico de la Universidad Diego Portales, Hugo Herrera. A su juicio, el Mandatario presenta dos facetas diferentes entre sí.
“En la gira uno pudo ver a esos dos Boric. En el fondo, uno más cercano a cancillería, a políticas de Estado, a una actitud más de largo plazo”, indica.
“Y también está el Boric más partisano, más vociferante, reclamando contra el imperialismo, y algo torpe también. Como más niño, que se toma muy en serio a él mismo. Un Boric con el ego desatado, por decirlo así”, dice el doctor en filosofía.
Según Herrera, esos dos Boric serán los que van a marcar la trayectoria larga del gobierno. Así, dice, la pregunta que hay que hacerse es cuál de los dos va a prevalecer.
“De eso depende no solamente el éxito del gobierno y su capacidad -por ejemplo- de convencer a la oposición, sino que también de mantener el liderazgo político nacional”, plantea.
“Porque si la ciudadanía empieza a ver a un Boric muy partisano, eso va a deteriorar su apreciación en las encuestas probablemente, mientras que si prevalece el Boric más de Estado, yo creo que podría recuperarse o mantener niveles de aprobación razonables”, añade.
Eso sí, para el especialista en temas políticos también hay elementos positivos que se pueden sacar en limpio tras la visita de Estado. “Para ser justos, hay cosas destacables de la gira, como la cercanía que evidenció con Justin Trudeau”
“Pero el punto es ese: si termina prevaleciendo el Boric partisano, esto va a quedar en la anécdota, y podría poner en riesgo la buena realización de la política exterior en el largo plazo”, sostiene.
¿ANÉCDOTA O ATARANTAMIENTO?
Tal como se indicó, uno de los momentos que generó diversos comentarios fue el lapsus que sufrió el Presidente Boric en su discurso en la novena Cumbre de las Américas, cuando criticó a Estados Unidos por no tener representantes en la Coalición Américas por la Protección del Océano, sin darse cuenta que a unos metros estaba John Kerry.
Al respecto, Herrera menciona: “Yo creo que aquí se juntaron tres cosas. Por una parte, hubo una mala información de parte del equipo que estaba alrededor de él”, esgrime.
“Diría, además, que fue un atarantamiento del propio Boric y una falta de experiencia. Y el tercero, fue víctima de un ánimo contestatario, tratando de anotarse un punto barato pero al final termina devolviéndosele el asunto, estallándole en la cara”, ahonda.
“En el fondo, se junta una falta de experiencia, una mala coordinación con los asesores y un atarantamiento ideológico”, concluye.
Una visión diferente tiene Cabezas, para quien el hecho apenas queda en la anécdota. “Entendemos que es un error no menor, pero para la ciudadanía eso les importa cero. La gran mayoría de las personas no tiene idea quién es John Kerry”, enfatiza.
RECOMPONER LA IMAGEN INTERNACIONAL
Una opinión similar es la que tiene el coordinador académico de la Escuela de Ciencia Política UDP, Rodrigo Espinoza. El especialista destaca que se mostró “como un mandatario que apuesta por un proyecto de izquierda distinto al de la izquierda tradicional, y sobre todo diferente a lo que fue la izquierda del denominado socialismo del siglo XXI”.
En la misma línea, Espinoza añade que Boric está dando señales de mostrar, a nivel internacional, “una izquierda con espíritu más bien social-demócrata, donde al sistema de libre mercado busca dotarlo con una cara más de justicia social, justicia económica y por supuesto justicia medioambiental”.
Lo importante está en que se han afianzado las relaciones con Canadá y Estados Unidos, y sobre todo -creo yo- que la idea de Boric también tiene que ver con recomponer la imagen internacional de Chile
- Rodrigo Espinoza, coordinador académico de la Escuela de Ciencia Política UDP
Por lo mismo, el especialista sostiene que probablemente los niveles de aprobación de Boric en la encuesta Cadem se deban, en parte, a su desempeño en esta gira, “pese a los eventos que han ocurrido a nivel doméstico a lo largo de la semana”.
Consultado por su impasse con John Kerry, Espinoza descarta que pueda tener un costo con Estados Unidos, con los países vecinos o incluso a nivel doméstico.
“Muchas veces esto ocurre. No es lo deseado, pero básicamente estas actividades tienen que ver con agendas de reuniones bastante intensas, y los mandatarios obviamente son propensos a cometer errores de este tipo”, dice, mencionando que a presidentes anteriores como Sebastián Piñera y Michelle Bachelet también les ha pasado.
“Pero lo importante está en que se han afianzado las relaciones con Canadá y Estados Unidos, y sobre todo -creo yo- que la idea de Boric también tiene que ver con recomponer la imagen internacional de Chile, que se deterioró en los últimos años a raíz de la suspensión de la COP25 y también por los informes de organismos internacionales vinculados a violaciones a los derechos humanos por parte de las policías durante el estallido social”, concluye.
