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Imputado por ataques sexuales a ancianas ya era investigado por otro caso en Punta Arenas

El 18 de mayo habría fracturado el dedo de una kiosquera mientras intentaba violarla. En esa oportunidad, el hombre quedó con arraigo nacional y prohibición de acercamiento a las víctimas.

 

Tres mujeres de 78, 91 y 92 años, que viven en las poblaciones Cecil Rasmussen y Juan Williams de Punta Arenas, fueron atacadas sexualmente durante la última semana. El único imputado de la causa, José Aya Reyes, habría ingresado a la fuerza a sus domicilios e intentado violarlas.

El sujeto fue formalizado por triple abuso sexual y violación de morada. El Juzgado de Garantía de Punta Arenas ordenó que el imputado –que vive en situación de calle– cumpla con prisión preventiva mientras está siendo investigado.

Sin embargo, este no es el único procedimiento por violencia de género que enfrenta. Actualmente está procesado por presuntamente fracturar un dedo a la locataria de un kiosko mientras intentaba violarla, el 18 de mayo.

En esa oportunidad, el tribunal determinó que cumpliese con arraigo nacional y prohibición de acercamiento.


El ataque a una kioskera

De acuerdo a los antecedentes del Ministerio Público, el imputado concurrió a mediodía del martes al kiosko ubicado en Avenida España, donde se acercó a quien atendía el negocio para preguntarle por servicios de compañía.

La mujer –de 59 años– le dijo que no conocía locales de ese tipo. Su respuesta provocó una reacción violenta en el imputado, quien le habría agarrado de sus ropas y lanzado al suelo con intenciones de abusar de ella. La agresión provocó que la víctima resultase con una fractura expuesta en el dedo meñique de su mano derecha.

El episodio fue visto por vecinos del lugar, quienes redujeron al hombre y se lo entregaron a Carabineros.

Al día siguiente, el fiscal Oliver Rammsy formalizó el ataque por el delito de lesiones graves, solicitando como medidas cautelares una orden de alejamiento y arraigo nacional. Sin oposición de la defensa, el juez Juan Villa acogió ambas cautelares.

La investigación de esa causa se cerró el viernes pasado, un día antes de ser detenido por dos ataques sexuales en la Población Cecil Rasmussen. A esas alturas ya habría intentado violar a una anciana de 91 años en calle Brasileira.


La locataria del kiosko está representada por el Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género, que interpuso una querella en contra de Aya Reyes por lesiones graves.